La primera de España y una de las más completas de Europa dedicada al servicio sanitario de fronteras y a la regulación y tráfico del movimiento migratorio. Atendía a los españoles repatriados por estar enfermos y sin recursos, así como a inmigrantes enfermos y sin recursos que llegaban a la frontera. Contaba con un pabellón de reconocimiento de posibles enfermos afectados de procesos infecto-contagiosos, laboratorio químico-bacteriológico, pabellón de aseo, ducha colectiva, peluquería para rasurar el pelo, desinsectación; un pabellón para desinfección de ropas y enseres; un pabellón albergue para el aislamiento de enfermos; y un hospital de aislamiento para procesos epidémicos.